lunes, 14 de diciembre de 2015

12 tipos de personas que nos complican la vida


Para llegar hacia la meta que deseas, ya sea personal, económica, profesional o sentimental, hay un ingrediente fundamental que puede cambiar tu vida: tienes que rodearte de la gente correcta. Porque como bien dicen, dime con quién andas y te diré quién eres.
Así que empieza ahora mismo a analizar si la gente que te rodea, quién no te está colaborando mucho para estar donde quieres estar o lograr lo que deseas lograr.
Recuerda esto: fuiste creado para ser águila, no vas a llegar a ningún lugar si de lo te rodeas es de gallinas. (Y antes de que me salgan los defensores de gallinas, simplemente lo digo sin ofender, en la comparación del vuelo que puedes tomar siendo un águila o de quedarte sin despegar porque una gallina voladora nunca se ha visto).
Revisa tanto quiénes son tu círculo de amigos como tu entorno en general, incluso, 
muchas veces tenemos que alejarnos o considerar si seguimos frecuentando a ciertas personas de nuestra familia, pues aunque tengan nuestra misma sangre, son gente que no tienen nuestra misma visión, carecen de un propósito de vida o el camino de vida es diferente al tuyo y es mejor hacernos a un lado. Recuerda que no es por interés, pero si te rodeas de gente que te empodere que te apoye, te dé una mano, llegar a consolidar cualquier deseo es más fácil que encontrándose con tanta gente negativa, envidiosa, juzgadora, comparativa y demás que existe.
Quizás en tu lugar de trabajo, en la universidad, en tu escuela, las personas que te rodean no son las correctas, entonces recuerda que ellas no necesariamente deben ser tus amistades y que debes fortalecerte y tenerles claramente identificados para que no te roben energía.
Hace ya algún tiempo compartí en otra columna, las características de las personas que no roban la paz, la energía, aquellos a quienes yo llamo vampiros energéticos en general y cómo reconocerlos.
En esta columna y basándome en una clasificación del reconocido sicólogo, terapeuta familiar, sexólogo clínico y teólogo, Bernardo Stamateas, a quien considero un gran maestro a través de sus libros, te comparto 12 tipos de personas que nos complican y que él toca en su libro "Gente Tóxica". Será fácil que identifiques a estas personalidades, que unidas a las características de los ladrones de energía, te pueden ayudar para que, por favor, te alejes de ese tipo de gente.
Stamateas reconoce estos tipos de personas problemáticas:
Los meteculpas: Quién no ha escuchado la típica frase de una madre que le dice a su hijo: "con todo lo que yo hice por ti y ahora tú me pagas de esta manera". Las personas que nos meten culpa, nos meten una emoción que nos paraliza, que nos impide seguir desarrollando el potencial que tenemos; la culpa es la vergüenza, enfado y boicot contra uno mismo. Vivir con culpa es vivir con cadena perpetua (Aguas con quien te está activando el sentimiento de culpa y aguas con que seas tú mismo).
El envidioso: La envidia es una emoción que afecta a cualquier individuo que no esté enfocado en su propia vida ni en sus metas. Tú sabes reconocer muy bien a quien te tiene envidia.
El descalificador: Es la persona que tiene como objetivo controlar nuestra autoestima, hacernos sentir "nada" ante los demás, para que de esta forma él pueda brillar y ser el centro de atención. Un jefe a su empleado: "Excelente trabajo, lástima que lo has entregado tarde". (Es alguien que está buscando no resaltar lo bueno sino hacerte notar tus debilidades.)

El agresivo verbal: Son personas difíciles, complicadas que minuto a minuto obstaculizan nuestra existencia, que parecen encontrar placer en hacernos difícil la convivencia o nuestro trabajo. Son personas que ejercen su poder a través de gritos, malos tratos, palabras groseras y que se pasan desvalorizando a sus semejantes.
El psicópata: Son expertos en la mentira y en los engaños y tienen como fin traicionarte y arruinar tu vida. Son personas que muestran una falsa imagen siempre y tratan de hacerte creer que están interesados en lo que realidad no están.
El mediocre: Son personas que se conforman, que se limitan, y limitarnos es una manera de morir, de decrecer, de aplastarte y sumergirte en una monotonía y en una rutina que no tiene desafíos ni éxitos. La vida la conquistan los que se animan y le dan pelea.
El chismoso: Un deporte nacional en muchos países, casi, del ser humano en general. Antes de concentrarte en la vida de los demás, enfócate en la tuya.
El autoritario: "Esto es así y si no te gusta, ahí está la puerta". Con esa frase puedes sacar tus conclusiones.
El neurótico: Son personas que buscan llamar la atención porque tienen la necesidad de ser amados y aceptados, de reconocimiento, de poder y liderazgo, de independencia y de perfección; por lo tanto son personas agresivas, conflictivas, llenas de culpas, inhibidas, inteligentes, extremistas, perfeccionistas, egoístas, infantiles.
Manipulador: Son personas que estudian a las personas en busca de su vulnerabilidad y debilidad para manejarles a su antojo. Buscan gente por lo general dependiente, crédula, gente con complejos de salvadores o llenos de culpa.
El orgulloso: Es quien tiene un exceso de confianza en sí mismo, en lo que dice, en lo que hace, en las decisiones que toma; para él todo lo que hace es perfecto; él es Dios y lo hace todo bien y nada ni nadie pueden contradecirle.
El quejoso: Todo les molesta o les fastidia, hasta si sale el sol. El tema es quejarse, encontrar un motivo para pensar que el mundo está en contra de ellos y que nadie es capaz de entenderlos. La queja es un lamento, una demanda, un reproche, un disgusto, un reclamo permanente que lo único que logra es alejar a las personas.
Ahora queda en ti la tarea de empezar a sacudir tu vida de toda esa gente que no aporta. Te aviso que te vas a sentir más ligero y emprenderás el vuelo hacia tus metas de manera más fácil.
Y recuerda: ¡a sonreír, agradecer y abrazar tu vida!
¡Gracias por existir, compartir y estar

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